Extendió esa solidaridad a los militantes del agua “reprimidos” y a las familias de los “asesinados”, en el documento que cierra con la consigna “Por la soberanía alimentaria: Paren con la apropiación del agua”.

Del 14 al 17 de marzo se llevó a cabo en Marsella, Francia, el Foro Mundial Alternativo del Agua, escenario construido por movimientos y organizaciones sociales para evidenciar los intentos de apropiación del recurso por parte del VI Foro Mundial del Agua, realizado paralelamente y en la misma ciudad por el Consejo Mundial del Agua y el Banco Mundial.

Dirigentes de La Vía Campesina de Turquía, Brasil, Bangladesh, Madagascar, Portugal, Italia, Francia y México llegaron hasta Marsella para participar de las actividades del foro alternativo.

En su declaración posterior al encuentro, los campesinos demandaron que el derecho al agua sea respetado, “dentro del principio regulador de la soberanía alimentaria”. “Afirmamos que la privatización y la mercantilización del agua y de todo otro bien común (semillas, tierra, conocimientos locales y tradicionales, etc.) son un crimen contra la tierra y la humanidad”, expresaron.

El 14 de marzo se celebró un nuevo Día Mundial de Lucha contra las Represas. Esa lucha está directamente vinculada a la de defensa del agua como bien libre y público. Por eso La Vía Campesina puso énfasis también en el tema en su documento del 18 de marzo. “Los grandes proyectos de represas aprisionan y se apropian del agua, sin tener en cuenta necesidades, prácticas tradicionales ni la opinión de las comunidades locales”, además de las afecciones sobre los ecosistemas.

Para la red campesina la mercantilización del agua, del carbón y de la biodiversidad, los transgénicos, las nanotecnologías y la geoingeniería son las “nuevas propuestas” del neoliberalismo para responder a las crisis. “La economía verde es una falsa solución frente a los cambios climáticos y la escasez del agua”, sentenció al respecto.

A la hora de enumerar las principales amenazas para el agua La Vía Campesina empieza por el modelo de producción agroindustrial. Denuncia que ese modelo, los monocultivos y la industria agroquímica asociada han contaminado las aguas y puesto la salud de las poblaciones locales en peligro. “Defendemos las prácticas agroecológicas y la agricultura campesina, que ponen en práctica la soberanía alimentaria y contribuyen con la preservación y la utilización sustentable del agua”.

Para La Vía Campesina el agua debe ser manejada de forma pública, democrática, en niveles locales y sustentablemente. En ese sentido, los campesinos reivindicaron los conocimientos locales y tradicionales de manejo del agua, “que protegen y consideran el ecosistema en su totalidad, y existen desde siempre”. “Las políticas públicas y las leyes sobre el agua deben reconocer y respetar esos conocimientos”, concluyeron.

Foto: http://www.redes.org.uy