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21 de noviembre de 2012 | Entrevistas | Gira Internacional de Solidaridad con comunidades afectadas por megaproyectos mineros en Centroamérica | Derechos humanos | Industrias extractivas
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El 2 de mayo de 2012 es recordado por los 10 presos políticos de Barillas como el nefasto día en que fueron detenidos por particulares en diferentes lugares del municipio, sin que se les diera una explicación ni lectura de los cargos, en una flagrante violación a sus derechos sociales y políticos.
Los acontecimientos iniciaron el 1 de mayo cuando durante las fiestas municipales una persona fue asesinada por la seguridad de la empresa y una turba de manifestantes se reunió para exigir justicia.
Posteriormente a esa situación, al otro día, se dieron las detenciones.
Como fue documentado hace unos meses por Radio Mundo Real, en el municipio de Santa Cruz Barillas –departamento de Huehuetenango, Guatemala- se lleva a cabo un fuerte proceso de resistencia a la construcción de la hidroeléctrica Santa Cruz, en manos de la empresa española Hidralia SA, proyecto que fue rechazado por la comunidad, ejerciendo su derecho a las consultas populares que ya desde el año 2007 entregaron más de un 90% de negativa a la implementación de proyectos hidroeléctricos y mineros en la región.
Después de más de siete meses de detención, nueve personas permanecían aún en prisión, como fue constatado por la Misión Internacional de Solidaridad con las comunidades en oposición a los proyectos mineros e hidroeléctricos en Guatemala y El Salvador organizada por la federación ambientalista Amigos de la Tierra Internacional.
El 15 de noviembre la delegación internacional se reunió con los presos políticos en el Centro de Detención Preventiva Zona 18 de la capital guatemalteca. Allí los detenidos relataron cómo se dieron las capturas, ejecutadas por personas particulares del pueblo de Barillas, cómo les golpearon y les trasladaron posteriormente a Huehuetenango y a la capital.
En un diálogo con la delegación al que pudo acceder y registrar Radio Mundo Real dentro del presidio, los presos manifestaron la ilegalidad de la captura y las acusaciones por delitos graves, como terroristas y delincuentes superiores, sin ningún soporte legal ni acervo probatorio.
"Nosotros lo que pedimos es que la justicia sea justa y no injusta, porque aquí están actuando injustamente con nosotros, porque somos inocentes, campesinos que apenas ganamos nuestro sustento diario para sostener nuestras familias, y nosotros ya llevamos casi 7 meses de estar aquí, y no se ha solucionado nuestro problema […] nosotros lo que más pedimos es nuestra libertad” manifestó Saúl Amelio Méndez durante el encuentro con la Misión Internacional.
La preocupación de los detenidos de Barillas, además de lo relacionado con mantenerse privados de la libertad injustamente, tiene que ver con la situación que afuera están viviendo sus esposas y sus hijos, que no cuentan con recursos económicos para sobrevivir y realizar visitas a la cárcel y en donde se compromete la alimentación, la educación y la garantía de la vida.
Por su parte, Esteban Bernabé Gaspar, maestro de educación primaria rural bilingüe, manifestó que "mientras la Constitución y la ley dice que hay participación y libertad, dónde está la libertad, queremos saber dónde está la seguridad cuando a mí me agarraron y me dijeron que soy guerrillero, yo quisiera saber qué quiere decir la palabra guerrillero, eso ya no estaba desde los 80, si sabemos hubo los acuerdos de paz y ahora queremos saber dónde están esos acuerdos de paz, nos van a dejar libres o nos van a matar a todos?".
En visitas al centro penitenciario, la empresa ha pedido a los presos que lleguen a un acuerdo para levantar las acusaciones y permitirles así regresar a su comunidad.
Sin embargo, como lo manifestaron los presos políticos, a pesar de estar enfermos y necesitar exámenes médicos, entre muchas otras demandas, ellos no quieren ninguna negociación con la empresa, pues la detención es injusta y aceptar las presiones y estrategias de la empresa llevaría a sentar un equívoco precedente en el que se entregaría el poder a la empresa para seguir llevando a cabo actuaciones en contra de la población.
Juan señaló que "nosotros queremos que la empresa se vaya de ese lugar, porque mientras ellos van a estar ahí yo pienso y sueño que va a haber más muertos, más ordenes de captura y pueden traer más gentes inocentes a la cárcel de aquí. De repente nosotros salimos y después van a hacer otro problema allá y otros compañeros de nosotros van a venir aquí, va a pasar lo mismo, lo que queremos es que esa empresa se vaya de ese lugar".
Luego de la visita al Centro Penitenciario, Esteban Bernabé y Pascual de Pascual Pedro fueron puestos en libertad, como se les anunció en la audiencia del día anterior, y participaron de la conferencia de prensa de la Misión Internacional.
Los demás esperan la audiencia del 26 de noviembre y que se dé el mismo desenlace que en los casos de sus compañeros. Al respecto, la Presidenta de Amigos de la Tierra Internacional Jagoda Munic expresó que dicha federación, desde su Comité Ejecutivo y grupos miembros, permanecerá atenta a lo que ocurra en dicha audiencia.
"A las comunidades en resistencia se las ha acusado de terrorismo y hemos comprobado que, lejos de ello, se trata de defensores y defensoras de sus territorios y sus medios de vida", sentenció la activista ambiental croata.
Escuche los testimonios de los prisioneros políticos captados en el presidio en audio adjunto.
Foto: Víctor Barro (AT España)
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