Representantes de diversas organizaciones y movimientos sociales que estuvieron trabajando de lleno en la organización de la Cumbre de los Pueblos armaron una especie de ronda, que dio paso al intercambio entre los propios actores, con el público en general y la prensa. También hubo tiempo para la solidaridad con el pueblo paraguayo, ante el golpe de Estado parlamentario que acaba de derrocar al presidente constitucional de ese país Fernando Lugo.

Al final de la actividad, Radio Mundo Real entrevistó a Darci Frigo, de la organización brasileña Tierra de Derechos, para tener una breve evaluación general de la Cumbre de los Pueblos desde el propio espacio encargado de la organización de ese encuentro.

Las numerosas redes sociales brasileñas destacan que la cumbre ha elaborado una agenda de luchas para los próximos meses, y que por eso el proceso de trabajo iniciado en Rio de Janeiro debe continuar, no terminar en este encuentro. La cumbre finaliza, pero el proceso de luchas se mantiene, destacaron los portavoces en la conferencia de prensa.

Los impactos sociales y ambientales de los agrocombustibles, su competencia por tierras con el sector alimentario (en un mundo con más de 1000 millones de personas que padecen hambre), los monocultivos en términos generales, fueron algunos de los temas más recurrentes.

Otro de los aspectos más destacados por los organizadores de la Cumbre de los Pueblos fue el relativo a las grandes movilizaciones que se hicieron en Rio de Janeiro estos días. Ese fue el primer punto señalado por Frigo en la charla con Radio Mundo Real. Salimos “ampliamente victoriosos desde el punto de vista de la construcción de movilización popular, con varias manifestaciones públicas y una histórica de más de 80 000 personas en el centro de Rio de Janeiro”, dijo. Esa protesta se realizó el 20 de junio, en el marco del llamado Día de Acción Global.

Frigo señaló que espera que “con el ascenso de las movilizaciones sociales podamos ampliar las pautas y agendas, especialmente la lucha por derechos, que en este momento sufre ataques de todos lados, como los derechos de las mujeres, del agua, de la soberanía alimentaria”.

La Cumbre de los Pueblos dio especial importancia a la realización de plenarios de convergencia y asambleas, en lugar de centrar el trabajo en actividades autoconvocadas, como solía ocurrir en los foros sociales mundiales. “Era preciso dar ese paso, crear una dinámica metodológica que permitiese un diálogo donde hubiese puntos comunes y convergencias de los sujetos. Las plenarias y asambleas permitieron ese diálogo, la consolidación de posiciones”, consideró Frigo. “En el proceso de construcción de la Cumbre de los Pueblos, el principal momento fue cuando conseguimos unificarnos en una posición contraria a la ’economía verde’, eso dio un salto importante desde el punto de vista de la unidad política”, agregó.

Este nuevo proceso de convergencia de movimientos y organizaciones sociales de diversas partes del mundo busca respetar la diversidad, según afirmó Frigo, y no imponer “hegemonías” o “pautas”. La idea fue “abrir los diálogos para construir agendas comunes”.

Finalmente el dirigente fue consultado sobre las negociaciones de la ONU sobre desarrollo sustentable, que terminaron también este viernes en Rio de Janeiro. La cumbre oficial “fracasó”, evaluó, “en la medida que no avanzó para enfrentar los problemas reales que la humanidad vive hoy, la crisis alimentaria, ambiental y social”. Para Frigo es necesario “construir una dinámica de movilización, de presión sobre los Estados y el sistema de la ONU”, a fin de que la “agenda construida en el ámbito de la sociedad civil pueda avanzar todavía más con conquistas concretas”.

Foto: Radio Mundo Real