Luis Manuel hace parte del proyecto Big Bang Callejero, quienes colaboraron con el V Encuentro Latinoamericano de Experiencias de Educación Popular Ambiental en Pinar del Río – Cuba, y hacen estructuralmente parte del proceso de educación popular ambiental con el Centro de Educación y Promoción para el Desarrollo Sostenible: CEPRODESO.

El proyecto sociocultural Big Bang Callejero busca como objetivo fundamental sensibilizar a los diversos factores sociales y grupos comunitarios con su realidad socioambiental a través de los diferentes códigos artísticos para incidir en la auto transformación de los actores y su contexto.

También pretende crear capacidades para elevar la calidad de vida de aquellos que se inserten en los espacios de creación potenciando la infraestructura, fortaleciendo el papel de la mujer en la sociedad, instaurando fuentes de ingresos económicos para la población e impulsando de esta manera el desarrollo comunitario.

El proyecto puso su arte en función del V Encuentro celebrado en Cuba. “Obviamente el aporte nuestro tiene que ser, desde el arte que hacemos, dejar claro y comunicar de qué va lo que estamos haciendo en la calle y las principales lógicas de lo que está sucediendo en nuestro contexto. Nosotros luchamos también porque queremos un socialismo mejor, porque queremos una mejor Cuba, porque queremos transformar parte de lo que obviamente vemos que sobra. Queremos deshacer en la sociedad los obstáculos, el verticalismo, el machismo que todavía queda en la sociedad” señaló el artista en diálogo con nuestro corresponsal en el encuentro de educadoras y educadores ambientales, Danilo Urrea.

En el Encuentro, Big Bang Callejero participó con la facilitación de una de las comunidades de práctica referida a los códigos alternativos y su función en la educación popular ambiental.

Frente a este trabajo y su concepción, Valdéz señaló que los códigos alternativos deben ponerse en función de la transformación, en una apuesta por su generación, por sus tiempos, por la realidad de los conflictos que se están viviendo como sociedad. La creación de un sujeto colectivo, más allá de la individualidad de artistas, debe preocuparse por un sujeto colectivo mayor que son las comunidades, o el país, incluso los demás países, reflexionó.

En las actividades desarrolladas durante los días pasados en Pinar del Río, el proyecto Big Bang Callejero realizó la exposición La piel de TECMA, en un espacio del corazón de la ciudad recuperado por el proyecto. El artista cubano expresó que “lo más fuerte es que fue muy duro tener el espacio. Es un edificio que fue historia porque allí torturaron a los que formaron parte de la lucha en el 26 de julio (de 1953) en Pinar del Río, ahí fueron torturadas y fueron asesinadas muchísimas personas. Luego era un baño público, un lugar donde se metían los aberrados sexuales, los exhibicionistas, un espacio donde las personas botaban sus basuras y los escombros de las reparaciones en sus casas, donde había una fosa al aire libre, los baños descargaban ahí, y nosotros llegamos a jugárnosla con eso, era inframundánico el espacio”.

A partir del trabajo de recuperación del edificio, la gente se dio cuenta que era un trabajo con un propósito interesante y la comunidad acompañó el proceso, desde los niños hasta los adultos.

La comunidad agradeció que en el Encuentro Latinoamericano se inaugurara el espacio, como escenario de transformación de la realidad desde el sentido invasor del arte para hacer un mejor país desde las libertades para participar activamente.