Pequeños proyectos asociativos que parten de las comunidades y que están en funcionamiento pueden servir como referencia para quienes estén pensando en transitar por iniciativas similares.

Radio Mundo Real conversó con una integrante de la Compostera La Pitanga, Mercedes Iriarte, que nos narró sobre la experiencia de trabajo en el colectivo con el compostaje artesanal. La Pitanga, en donde Mercedes trabaja junto a otros vecinos, se encuentra en las proximidades del Parque Andresito, de la ciudad costera de la Paloma, departamento de Rocha. La planta de compostaje artesanal surgió como un proyecto de un colectivo de vecinos de esa ciudad y lleva ya dos años en actividad. Mercedes nos contó sobre los orígenes del proyecto, aun antes de que ella participase.

Como en la zona “todo el suelo es arena, los vecinos no sabían cómo hacer para tener tierra”. Entonces consiguieron un predio que pertenece a la intendencia de Rocha, lo limpiaron y lo cercaron, y con un agrónomo que los asesoraba comenzaron a hacer las pilas todo con cosas orgánicas: podas, pasto, frutas que se pierden en la verdulería y sobras de comida de un comedor”, describió Mercedes.

“La ayuda que tenemos es de la Intendencia que nos da un lugar que no nos cobra, tenemos agua y luz. También al principio nos dieron una ayuda para comprar todas las herramientas”, agregó. Mercedes contó que tienen el grupo que denominaron “La Paloma” por la Red de Semillas Criollas y Nativas del Uruguay, que nuclea a cientos de familias productoras en la mayoría de los departamentos del país, y que también están haciendo plantines y aprovechando el compost para plantarlos. “Conseguimos unos canteros de madera que nos dio la intendencia. Estamos haciendo plantines, llevándonos a casa y la idea es devolver esas semillas al banco, hacer un banco de semillas”, nos contó orgullosa esta integrante de la Compostera La Pitanga de La Paloma.