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10 de mayo de 2016 | Entrevistas | Especial Golpe de Estado en Brasil | Anti-neoliberalismo | Derechos humanos | Género
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Este miércoles 11 de mayo, el Senado de Brasil completará la etapa de decisión sobre el inicio o no del proceso de juicio político (impeachment) a la presidenta Dilma Rousseff. De confirmarse, Dilma sería separada del cargo por un máximo de 180 días, mientras tiene lugar el proceso de investigación que deberá servir de base para la decisión de cesarla definitivamente de su cargo. Mientras tanto, los movimientos sociales brasileños semana tras semana llevan a cabo marchas, movilizaciones, ocupaciones de instituciones públicas en reclamo por mejoras en las políticas públicas, para que se investiguen casos de corrupción en los que los protagonistas son de la derecha política, y fundamentalmente en contra del golpe en curso.
A las vísperas de lo que puede ser el paso definitivo en el golpe contra el gobierno de Dilma, los movimientos populares se encuentran movilizados en varios estados de todo el país bajo la consigna "Ocupar todo en contra del golpe”. Desde temprano en la mañana, rutas nacionales de varias ciudades de 17 estados brasileños están siendo cortadas por los movimientos que integran el Frente Brasil Popular y el Frente Pueblo Sin Miedo. A su vez, sindicatos de docentes, de trabajadores/as de la banca, de la policía civil, entre otros, adhirieron al paro convocado por la Central Única de Trabajadores (CUT) para el día de hoy.
El centro de las acciones directas hoy (que en algunos casos fueron duramente reprimidas) estuvo en el corte de rutas. Tatiane Paulino de la coordinación del Movimiento de Afectados por Represas nos explicó el objetivo de estas acciones: “estamos haciendo la denuncia del golpe que se está dando en el país; hablando con los trabajadores que están en las carreteras; y también haciendo un proceso de mucha agitación política en el país para demostrar que nosotras no vamos a callarnos, que no vamos a quedar sentadas en las casas, y que nos vamos a movilizar ante todo lo que está ocurriendo”.
Foto: MAB
Contra un golpe patriarcal
En medio de tan convulsionado clima, en el día de hoy comenzó la IV Conferencia Nacional de Políticas para las Mujeres en Brasil, instancia convocada por el gobierno federal en la que participan mujeres de la sociedad civil de todos los estados y que tiene como objetivo generar propuestas para un Plan Nacional de Políticas para las Mujeres. Además de estar presentes allí, los movimientos feministas, en particular la Marcha Mundial de las Mujeres (MMM) participaron en las acciones y cortes de ruta en todos los estados.
Foto: Jornalistas Livres
Al ser consultada por las razones principales que llevaron a que las mujeres de la MMM salieran hoy a luchar contra el golpe, la militante Regina Brunet del estado de Rio Grande do Sul afirmó: “Nosotras defendemos la democracia, y sabemos que solamente a través de ella y de su profundización será posible garantizar los derechos de las mujeres”.
Como un segundo punto Brunet denunció el carácter fuertemente patriarcal del intento de golpe a la democracia: “entendemos que todo este proceso es extremadamente misógino con nuestra presidenta, hiere su dignidad en tanto persona, y que además es motivado por el hecho de que Dilma es una mujer que defiende nuestra agenda. Como feministas, tenemos la obligación de defenderla y de estar a su lado”.
De mal en peor
Tatiane precisó que la agenda de los movimientos “no es solamente la defensa del gobierno”, sino “de los derechos conquistados históricamente por los trabajadores”.
En referencia a ello, aclaró que en este último gobierno “no tuvimos conquistas específicas”. “Las violaciones de derechos humanos fueron tremendas. Podemos hablar de las violaciones de la Amazonia con la construcción de la hidroeléctrica de Belo Monte, de Rondonia en donde está la hidroeléctrica de Santo Antonio y Jirau en el río Madeira, y tantas otras hidroeléctricas que fueron construidas sin consultar a las poblaciones, violando derechos básicos, y sin siquiera garantizarle las condiciones mínimas para la supervivencia de estas familias”.
Sin embargo, la dirigente del MAB reconoce que “va a ser peor sin este gobierno”. Como ejemplo citó la reciente aprobación en el Senado, en contra de la opinión del Ejecutivo, de un proyecto de ley que flexibiliza las licencias ambientales. Se trata de la Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) 65/2012, que pasaría a permitir la instalación de un proyecto con la presentación tan sólo del Estudio de Impacto Ambiental realizado por la propia empresa.
Consultada sobre las acciones que tomarán los movimientos en caso de que se consume el golpe, Tatiane responde: “Las calles ya eran nuestras. Si se da el golpe, lo serán más”.
Escuche la entrevista completa con Tatiane Paulino del Movimiento de Afectados por Represas de Brasil en el archivo adjunto.
Imagen: Daniel Arroyo/ jornalistaslivres.org
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