El viernes 9 de mayo, desde la cumbre se informaba que en todo el país el paro había alcanzado “115 puntos de concentración, con participación de las comunidades indígenas, campesinas, afrocolombianas y populares, sumando cerca de 120 mil participantes”. Ese mismo viernes se levantó el paro: “Hemos establecido cosas muy importantes; que el Presidente de la República firme un decreto en el que da el respaldo jurídico y político a la instalación de una Mesa Única Nacional de diálogo, de negociación, de concertación sobre puntos mínimos, como un Fondo Campesino para nuestros compañeros de las organizaciones que estamos en este proceso de Cumbre Agraria”, dijo en entrevista a Radio Mundo Real, Ricardo Herrera, dirigente de una de estas organizaciones, el Coordinador Nacional Agrario (CNA).

Entre los acuerdos obtenidos, Herrera destaca también que se ha logrado incorporar al diálogo la desjudicialización de las protestas: “es decir, sacar de las cárceles a los compañeros que han sido detenidos en el paro y en las movilizaciones anteriores”. Además, prosigue el dirigente, “hemos logrado que se establezcan unos 30 proyectos de infraestructura, para inversión social”. Pero aclara que esto es apenas un comienzo: “el trabajo y la discusión vendrán adelante. Esta es una victoria parcial, podríamos decir, para el movimiento campesino en Colombia”.

En cuanto a la mesa en sí, el dirigente contó a RMR que la misma estará conformada por 35 dirigentes de las organizaciones que componen la Cumbre, “junto con el gobierno nacional a través de los ministros, de las secretarías y de las instituciones que tienen que ver con el desarrollo y establecimiento de políticas para el campo colombiano”. Con respecto a los plazos, afirmó que las organizaciones se han puesto 3 meses como meta para que se resuelvan las problemáticas más inmediatas. Entre las medidas más urgentes destacó la creación de un Fondo para la Economía Campesina, Negra e Indígena.

Sin embargo, Herrera afirma que se trata de un proceso largo “porque nosotros estamos planteando desde la Cumbre Agraria, políticas públicas para este país: son 8 puntos (ver aquí) donde se dice que se tiene que revisar el problema de tierras y territorios, que se tiene que analizar la política minero-energética, el fomento para el desarrollo y la producción del campo colombiano”.

También existe una cierta cautela con respecto a estos posibles avances, debido a la cercanía de la elección presidencial en Colombia, el próximo 25 de mayo: “a nosotros nos queda la duda de si estamos hablando con el Presidente o con el candidato”, en referencia a que el actual presidente Juan Manuel Santos se postula a la reelección.

El dirigente considera que la lucha se mantendrá firme: “porque a estos gobiernos capitalistas, neoliberales, hay que hacerles un paro para que nos escuchen, otro paro para firmar acuerdos, y otro paro para hacerlos cumplir”.

Por último, Ricardo Herrera al hacer una evaluación de lo que han sido las movilizaciones en torno al paro, destacó la unidad en el movimiento agrario, social y popular: “estábamos muy dispersos, pero fuimos capaces, las organizaciones de carácter nacional y regional, de forjar un proceso de unidad, de discutir, de analizar y tener nuestros acuerdos, y llegar a construir un pliego unitario de demandas”.