Macarena Castañeda, vocera de la Coordinadora Feministas en Lucha, recordó que esta coordinadora nace en 2013, cuando se realizó una marcha el 25 de julio de ese año en la que participaron más de 5 mil personas que repudiaron las declaraciones del Presidente Sebastián Piñera, quien dijo que una niña de 13 años, violada por su padrastro, podía ser madre.

Por esos días el caso conmovía al país y las declaraciones no hicieron sino mostrar la penalización social que todavía existe en torno al derecho de las mujeres al aborto, y cómo está instalada la idea conservadora de cercenar a las mujeres, niñas y adolescentes solo en el rol de “madres”.

Tras esa multitudinaria marcha, la movilización por el derecho al aborto libre, seguro y gratuito se repite cada año, cada 25 de julio. En esta sexta edición, la consigna exige también que el aborto sea “legal”, es decir que la atención sea garantizada por el Estado, sin distinciones.

En 2017, Chile aprobó una ley que habilita el aborto por tres causales: en caso de inviabilidad fetal, riesgo de muerte de la mujer y en embarazos producto de una violación. Desde el movimiento feminista consideran que esta ley es “restrictiva” por eso la consigna de la marcha este año es: “No bastan tres causales”.

En este sentido, la lucha es por la “autonomía en los territorios y la autonomía en los cuerpos de las mujeres” para “ampliar despenalización legal y social del aborto”, explicó Macarena Castañeda a RMR.

La movilización de este año se da en medio de una “marea verde”, con la expectativa de que se despenalice el aborto en Argentina hasta las 14 semanas de gestación, con la sanción del Senado el próximo 8 de agosto. “Creemos que esta marcha será un antes y un después en la lucha por el aborto en Chile por la masividad que está teniendo el movimiento feminista en la región”, dijo la vocera.

((ACTUALIZACIÓN - 26 de julio))

Durante la marcha, varias manifestantes fueron atacadas. Repudiamos este ataque y compartimos el comunicado de la Coordinadora Feministas en Lucha de Chile: