El lobby empresarial en el seno de la ONU ha servido, en cambio, para que se implementen falsas soluciones que responden a los intereses de las empresas, que pasan a tener mayor control sobre tierras, recursos naturales y personas, agrega la federación ambientalista en un comunicado de prensa.

Sin embargo, este cuestionamiento al rol de las grandes corporaciones en el seno de la ONU, y a la permisividad del marco multilateral, no responde a una preocupación sólo de Amigos de la Tierra. Es la conclusión fundamental de la declaración conjunta de la sociedad civil titulada “No más control y cooptación empresarial de las Naciones Unidas”, que los ambientalistas promovieron el mes pasado junto a otras nueve organizaciones con presencia en decenas de países. Algunas de ellas son La Vía Campesina, la Red del Tercer Mundo, el Transnational Institute y el Consejo de los Canadienses. La declaración comenzó a circularse el 19 de abril y hoy tiene la firma de más de 250 organizaciones de la sociedad civil de diversas partes del mundo.

El comunicado de Amigos de la Tierra Internacional de este jueves destaca especialmente una instancia de las Naciones Unidas. “Las instituciones e iniciativas de la ONU tales como el Pacto Mundial les ofrecen demasiado espacio de influencia a las empresas privadas”, señala el texto. No obstante, la federación ambientalista, que tiene presencia en cerca de 80 países, ya ha advertido varias veces sobre la cooptación de las empresas de varios ámbitos de negociaciones de la ONU, como las Conferencias de las Partes (COP) de la Convención Marco sobre Cambio Climático.

El Pacto Mundial es, según la información oficial, una iniciativa internacional propuesta por la ONU con el propósito de conseguir un compromiso voluntario de las empresas para “hacer suyos, apoyar y llevar a la práctica” un conjunto de valores en materia de derechos humanos, normas laborales, medio ambiente y lucha contra la corrupción.

“Aunque el Pacto Mundial sostiene que las empresas que lo suscriben ’adhieren a estándares aceptados internacionalmente’, en realidad muchas de ellas no cumplen con estos estándares”, advierte Amigos de la Tierra en su parte de prensa. “No existe un mecanismo creíble de rendición de cuentas, contrariamente a lo que dice el Pacto Mundial, que sólo expulsa a las empresas si no informan sobre las violaciones a los derechos humanos, no porque ellas mismas las cometan”, agrega.

La oficina del Pacto Mundial respondió a la declaración “No más control y cooptación empresarial de las Naciones Unidas” de la sociedad civil, argumentando que siempre ha dejado claro que la ONU y la comunidad empresarial no comparten los mismos objetivos, y que sólo hay algunas áreas de interés común.

No obstante, los promotores de la declaración de las organizaciones y movimientos sociales reafirman que la iniciativa del Pacto Mundial le hace la vista gorda a las malas prácticas empresariales, y facilita la cooptación y copamiento empresarial de los procesos y resultados de la ONU.

El coordinador de la campaña de Corporaciones de Amigos de la Tierra Internacional, Paul de Clerck, evaluó que “la respuesta del Pacto Mundial hace caso omiso por completo del mensaje central de la declaración, que es que le da demasiado poder de influencia al sector privado y se ha olvidado que el papel de la ONU es proteger a las personas y la naturaleza de los crímenes empresariales”. “Por eso la ONU promueve cada vez más soluciones falsas que no están al servicio del interés público, sino al servicio más que nada de incrementar las ganancias de las empresas”, se lamentó de Clerck.

En tanto, a comienzos de este mes el Grupo Principal de organizaciones no gubernamentales que siguió las negociaciones de la ONU en Nueva York, Estados Unidos, sobre la cumbre de Río+20 (que se realizará en junio en Río de Janeiro, Brasil), también alertó a gobiernos y organismos de ese marco multilateral sobre el peligro de cooptación y copamiento empresarial. En una declaración del 1º de mayo, ese grupo aseguró que “la sociedad civil sigue sintiéndose sumamente incómoda con el concepto de la economía verde, que se utiliza para maquillar de verde el viejo modelo desacreditado del desarrollo insustentable”.

Foto: http://www.tni.org