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28 de julio de 2009 | Entrevistas | Derechos humanos
Cuestión de riquezas
Proyectos turísticos amenazan bahía salvadoreña
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La Bahía de Jiquilisco y su rica biodiversidad están en peligro ante la inminente instalación de megaproyectos turísticos, denuncian los habitantes de esta región salvadoreña. “Es el pulmoncito que todavía queda en El Salvador”, afirmó en diálogo con Radio Mundo Real el dirigente local Manuel Calderón.
Según estimó, son 29 las comunidades de esta zona del Bajo Lempa que se verían perjudicadas por la “explotación irracional” que llevarán adelante capitales nacionales y extranjeros dedicados al rubro turístico.
La Bahía de Jiquilisco cuenta con una gran diversidad ecológica, ha sido declarada Sitio Ramsar y Reserva de la Biosfera, alberga una de las zonas boscosas más extensa del país y en su ecosistema conviven 1500 especies de flora y fauna.
“Desgraciadamente, la codicia de las empresas trasnacionales y de grandes empresarios nacionales ha dirigido la mirada a nuestro territorio, con la clara intención de explotar económicamente la Bahía de Jiquilisco a través de la ejecución de un megaproyecto turístico”, afirman los pobladores en un comunicado reciente.
Las organizaciones salvadoreñas aseguran que este tipo de megaproyectos se dan en el marco de los acuerdos de libre comercio que ha firmado el gobierno salvadoreño y el Proyecto Mesoamérica, antes conocido como Plan Puebla Panamá. La información que ha recibido la población de la Bahía de Jiquilisco sobre estos emprendimientos es muy vaga y no hay respuestas por parte de los voceros gubernamentales.
